La agonía de elegir - Aceites para el cabello y la piel
La variedad de aceites para el cuidado del cabello y el cuero cabelludo es enorme. Desde aceite de coco y argán hasta aceite de ricino y almendra, e incluso mezclas especiales. Son imprescindibles en el cuidado del cabello y el cuero cabelludo, ya que proporcionan una hidratación intensa, suavizan el cabello y calman el cuero cabelludo. Actúan como una barrera natural contra la pérdida de humedad y protegen contra influencias externas como los rayos UV o el calor del peinado. Además, muchos aceites fomentan el crecimiento del cabello y tienen propiedades antiinflamatorias, lo que los hace ideales para cueros cabelludos secos o irritados. Al combinar aceites, puedes aprovechar las fortalezas de cada uno y crear un tratamiento personalizado según tus necesidades. Por ejemplo, puedes mezclar aceite de jojoba con un aceite más pesado como el de ricino para lograr un cuidado equilibrado que hidrate y fortalezca la estructura del cabello. El aceite de jojoba suele llamarse "aceite", pero en realidad es una cera que se parece mucho al sebo natural de nuestro cuero cabelludo. Esta propiedad hace que el aceite de jojoba sea especialmente valioso para el cuidado. No deja una película grasa, es apto para todo tipo de cabello y tiene un efecto calmante sobre el cuero cabelludo.